El nivel que está mostrando últimamente Marco Asensio está haciendo que su nombre esté en boca de todos y es que su desparpajo y su olfato goleador está ahora mismo al alcance de pocos. Ayer volvió a dejar una prueba de lo que es capaz de hacer.
No habían pasado ni cinco minutos de partidos cuando el '20' blanco puso en pie al Santiago Bernabéu... otra vez. Y es que Marco Asensio está acostumbrando a la afición blanca a contemplar tremendos golazos...
El mallorquín parece tenerle cogida la medida a las escuadras de las porterías. Ayer Ter Stegen volvió a ver cómo un balón que salió de los pies de Asensio se colaba en su portería sin que nada pudiera hacer. En la ida disputada en el Camp Nou, más de lo mismo.
"Recordaré siempre estos dos goles. Ambos sirven para llevarnos la Supercopa, aunque el más difícil de meter es el del Camp Nou", decía anoche el jugador del Madrid sobre sus dos tantos.
Pero este tipo de goles no es algo nuevo para el balear. Hace un año, en el marco de la Supercopa ante el Sevilla, el ahora '20' firmó un tanto que fue otra obra de arte y que limpió las telarañas de la portería hispalense.