El Atlético Baleares sufrió para vencer al Valencia Mestalla en Son Malferit y sumar tres puntos que le permiten acariciar el título. A falta de tres jornadas para el final, los de Manix Mandiola suman siete más que el Hércules.
Arrancó con ímpetu el conjunto local, queriendo imponer su ritmo desde el inicio. Una salida en tromba para intimidar a su rival, preso de sus complejos por la posición en la tabla. Sin embargo, Ni Villapalos ni Nuha pideron abrir el marcador en la doble ocasión inicial.
Lejos de venirse abajo, el filial 'che' se fue armando de argumentos y le discutió el protagonismo al Atlético Baleares, que pronto recibiría el primer mazazo. Javi Jiménez firmaba el 0-1, un jarro de agua fría para la hinchada congregada en el Son Malferit pasada la primera media hora de juego.
Al filo del descanso, Villapalos empataba el encuentro y, minutos después del paso por vestuarios, Nuha colocaba el 2-1. Una respuesta que dejó grogui al Valencia Mestalla, superado por el potencial ofensivo de los de Manix Mandiola.
A la hora de juego, De la Espada se quedó suspendido en el aire para rematar de cabeza un centro medido de Shashoua para firmar el 3-1 y poner tierra de por medio. Una paz que apenas duró ocho minutos, lo que tardó Sekou Gassama para recortar la diferencia.
Pese a sufrir para mantener el resultado, el Atlético Baleares consiguió amarrar otros tres puntos que le dejan el título de Liga a punto de caramelo. Los de Mandiola suman siete más que el Hércoles a tres jornadas para el final.