Aunque no pudo llevarse los tres puntos, el New England Revolution disfrutó de uno de los goles de la jornada, el de Cristian Penilla a Chicago Fire, que sirvió para provocar el reparto de puntos (1-1).
El delantero ecuatoriano, rozando el minuto 70, sentó cátedra sobre qué hacer al plantarte frente a un portero en un contragolpe. Por debajo en el marcador, su equipo se encomendó a él y no falló.
Penilla recibió un buen pase en profundidad en una salida rápida de su equipo buscando el área contraría y recibió el balón en la frontal del área, un tanto escorado.
El guardameta salió para tapar hueco y se postró ante él. Pinilla en lugar de tirar, paró el balón y, dio una vuelta al más puro estilo de Xavi Hernández. El cancerbero acabó en el suelo, pero tuvo tiempo para levantarse, aunque no pudo evitar el gol.
Tras sentar al portero, a Penilla se le cruzó un defensor, pero tampoco fue suficiente para que el 2-2 no llegara al luminoso, ya que el ecuatoriano esperó el momento exacto para golpear y acabó mandando el balón a las redes rivales... mediante un caño al zaguero. Golazo con todas las letras.