La tensa coexistencia entre Salamanca y Unionistas ha saltado por los aires. El club de accionariado popular denunció a su vecino por el codazo que Kristian Álvarez propinó a Álvaro Romero, lo que le ha costado una grave sanción de cuatro encuentros al mexicano. El Salamanca ha roto relaciones con Unionistas por ello.
Todo comenzó en el pasado derbi del 6 de octubre. Mediado el encuentro Kristian Álvarez propinó un horrendo codazo en la cara a Álvaro Romero, lo que dejó fuera de combate al jugador de Unionistas.
El mexicano vio únicamente la amarilla, y por la insistencia de los rivales, pero Unionistas le denunció ante el Comité de Competición. Fue la 'vendetta' por la expulsión del Helmántico de los empleados que se encontraban grabando el encuentro.
Las relaciones entre Salamanca y Unionistas nunca fueron fluidas, y ambos clubes han vivido en una suerte de 'guerra fría' hasta el día de hoy. El Salamanca ha decidido que la denuncia a su jugador ha sido la gota que colmase el vaso.
Kristian Álvarez ha sido castigado con cuatro partidos, así como con multas simbólicas para él y para el club. Y ello ha llevado al Salamanca a anunciar que rompe relaciones con su vecino y 'hermanastro'.
La 'guerra fría' es ahora un conflicto en toda regla entre los dos clubes de Salamanca, enfrentados desde su nacimiento, por su forma opuesta de entender el fútbol.