El parón internacional ha terminado, así que es buen momento para detenerse en algunos de sus capítulos más interesantes. Entre clasificaciones matemáticas para la Eurocopa del año que viene en Alemania y celebraciones llenas de júbilo, se dieron algunos sucesos no tan amables. Uno de ellos concentró las miradas de los aficionados en las redes sociales después de la victoria de Dinamarca sobre San Marino.
Rasmus Hojlund, que milita en el Manchester United y estuvo en la Atalanta, desde la que los 'red devils' le ficharon, se quejó, a través de sus 'stories' de Instagram, de la dureza de las entradas de sus rivales. Entendía que estos estaban intentando lesionarles a él y sus compatriotas a posta. Argumentó que, como sabe italiano, pudo comprender las conversaciones de los anfitriones, que, a su juicio, maquinaban esta forma de afrontar el partido.
"Hacemos mucho en el día a día para estar en nuestra mejor versión y mantenernos en forma para tantos partidos. ¡Este comportamiento de San Marino, intentando lesionarme, fue inaceptable! Fueron a por mí, como se pudo ver. Entiendo italiano y y pude oírles diciendo que tenían la intención de hacerme daño. Y, en las imágenes, se puede ver que solo tenían una idea en mente. La amarilla -por un rodillazo en la espalda que le propinaron- es un chiste", escribió.