Sergio Rodríguez, entrenador del Logroñés, confirmó en la rueda de prensa previa al partido contra la Ponferradina que no podrá contar ni con Roberto Santamaría ni con David González. El motivo, sus lesiones en el encuentro ante el Mallorca.
El entrenador del Logroñés, Sergio Rodríguez, aseguró que el partido frente el Mallorca del pasado domingo fue más duro, realmente, por las lesiones de Roberto Santamaría y David González, que por los cuatro goles encajados.
Rodríguez, en la rueda de prensa previa al encuentro de este miércoles contra la Ponferradina, afirmó que "hay partidos que duelen más porque uno no está a la altura o no hace las cosas bien", pero el encuentro contra el Mallorca "estuvo muy condicionado", añadió en alusión a lo sucedido en menos de diez minutos, con un gol encajado y una expulsión "y los jugadores que tuvieron minutos pueden estar con la conciencia tranquila".
Remarcó la importancia de mantener "un término medio" tanto en las victorias como en las derrotas porque "el trabajo del día siguiente tiene que ser el mismo para crecer y para preparar los partidos".
"El equipo tiene los pies en el suelo porque sabe que la competición es muy difícil y muy larga, y esto, unido al hecho de que los partidos son cada tres días, hace que no haya margen para pensar en el domingo, sino solo en la Ponferradina", aseveró.
Destacó que la Ponferradina es un equipo que "se le atraganta a la mayoría de sus rivales y es capaz de competir en todo tipo de terreno, con todos los equipos y con todo tipo de juego". Además, avisó de que su motivación será "alta" porque ganaron y jugaron un muy buen partido contra uno de los equipos más fuertes de la competición, el Leganés, pero "el Logroñés tratará de igualar ese estado anímico".
El técnico confirmó que el portero Roberto Santamaría y el delantero David González, ambos lesionados contra el Mallorca, están descartados para este encuentro contra la Ponferradina, mientras que el resto de jugadores con molestias "siguen su proceso y se valorará su estado físico".
"Este año es especial por la pandemia de la COVID-19 y el calendario se ha comprimido en esta primera vuelta por lo que los resultados son las lesiones de los jugadores", lamentó. El equipo, detalló, jugará nueve partidos en 20 o 25 días, lo que afecta al nivel de juego, a la intensidad y a la salud de los futbolistas, pero "es un año especial" y espera que esa no sea la tónica de posteriores temporadas.
Lamentó que Andoni sufriera un partido "desgraciado" por su expulsión a los cuatro minutos de empezar el encuentro, por lo que "hay que dejarle su espacio, ya que es una cuestión futbolística que requiere de un par de días para que se le quite la mala leche".
En cuanto a Rajiv van La Parra, comentó que "va entrando poco a poco en el equipo aunque viene sin pretemporada y lleva tiempo sin jugar, por lo que hay que seguir una línea progresiva para ver su buen nivel porque si le metes antes de tiempo puede ser perjudicial para él".
"Hay que intentar que muestre su mejor versión. Dado que es un jugador que lleva tiempo sin competir, necesita entrenamientos y partidos, pero los minutos no se pueden regalar porque el equipo se está jugando mucho", concluyó.