Un gol del delantero uruguayo decide un encuentro de locura en el que el Málaga se vio dos veces por debajo en el marcador. El Sporting fue de más a menos a lomos de Viguera y Cop, pero se quedó con diez jugadores en el minuto 70 y lo pagó.
Juande Ramos tiene descontenta a la hinchada malaguista. Desde luego, está tardando demasiado en dar con la tecla con una plantilla confeccionada para más. Pero ante el Sporting arregló el primer desaguisado y por ahí vinieron los tres puntos.
Y por más que se enfadara Jony, acertó el de Pedro Muñoz en meter a Michael Santos. Un cambio que al mismo tiempo contradice al propio Juande, que tardó nueve jornadas en dar una oportunidad al delantero charrúa. Primer rato serio, primer gol.
También acertó Juande en poner a Ontiveros por el pitado Juanpi. El Málaga se abrió, colocó catapultas en las bandas y buscando el corazón del área rival ganó a un Sporting que dejó de respirar cuando Lillo fue expulsado y a Viguera y Cop le dijeron basta los pulmones.
Juande arregló un roto al que colaboró un Sporting que no tiene demasiados recursos. Aun así, le bastó la picardía de Cop para conectar con un Viguera que simplemente se limitó a dar un pase a la red. 0-1 y caras de incomprensión en La Rosaleda.
El Málaga no varió demasiado su guion. Sin un plan de fuego definido, pero cimentado en la calidad de sus jugadores de ataque, embotelló a un conjunto asturiano que vio cómo se le caía el muro con el gol de Pablo Fornals.
Segunda parte de locura
Juande ya había visto cómo se podía ganar el partido, pero antes Cop se lo puso más complicado con un golazo de falta que no celebró. Otra vez a remar. Con Ontiveros ya en el campo, y pese al desorden, el Málaga cogió del cuello al Sporting.
Hasta el final del encuentro el equipo blanquiazul vivió instalado en el balcón del área de Cuéllar. Así llegó el 2-2. Nueva aparición de un Sandro que cabeceó el servicio de un Ontiveros que jugó con el mismo descaro que le hace salirse en Tercera División.
Este plan generó desajustes y a punto estuvo el Sporting de aprovecharlo a la contra, pero en esta ocasión Kameni sí se hizo gigante ante Cop. Llegó la expulsión, el gol redentor de Santos, la victoria de Juande y la derrota del Sporting. Otra noche en el abismo de La Rosaleda. Otra noche en la que resucita el Málaga.