Sin gol no hay oxígeno en La Paz
Se fue de vacío Atlético Nacional del Estadio Hernando Siles a pesar de ofrecer una gran imagen en La Paz. Bolívar se bastó con un golazo de Riquelme para tumbar a los colombianos.
Pocos ganan en La Paz. A 3.600 metros de altura, son contadas las ocasiones en las que el equipo local se ha visto sorprendido en la Copa Libertadores. Y Atlético Nacional lo hizo todo para entrar en la historia del Hernando Siles, pero le faltó lo más importante: gol.
Gozó de más ocasiones que Bolívar, estuvo bien plantado sobre el cespéd y tuvo hasta un penalti a su favor. Pero la portería se le hizo muy pequeña a los delanteros 'verdolagas', a los que la altura de La Paz desvió su puntería. Y es que Bolívar sólo ha perdido en medio siglo con 12 equipos en su casa.
Si bien los primeros compases del partido fueron para el equipo local. Bolívar se hizo con el esférico y buscó con persistencia la portería de Monetti. Pero los de Almirón resistieron la salida en tromba de los locales para pasar posteriormente a la acción.
Un activo Aldo Leao lideró el ataque 'verdolaga' y puso en aprietos en más de una ocasión a Quiñónez. Pero cuando mejor estaba Nacional, Riquelme aprovechó un centro del área para rematar de primeras y clavarla en la portería de un Monetti que no hizo más que la estatua.
Un varapalo para los 'verdolagas', que no reaccionaron hasta la segunda parte. Dio un paso adelante Nacional en busca del empate, lo que también permitió a Bolívar encontrar huecos en su defensa a la contra. Y, en una de esas, Monetti evitó el segundo de Riquelme con una mano salvadora.
Poco a poco, Nacional fue encerrado cada vez más a su rival. Fue entonces cuando apareció Jaison Lucumí. El joven centrocampista recreó una jugada de ensueño que bien podría haber dado la vuelta al mundo si su disparo, tras irse de dos y tirarle el caño a un tercero, llega a coger puerta tras dejar a todos atónitos.
La vio pasar Quiñónez muy cerca, pero la que casi entra fue una de Lenis desde más de 30 metros. Una prodigiosa parada a mano cambiada evitó que los 'verdolagas' empatarán el partido con tiempo incluso para soñar con la remontada. No entró, y el oxígeno se le acababa a Nacional en La Paz.
Pero en el 90, cuando ya todo parecía visto para sentenciao, el árbitro señaló a los 11 metros tras un clamoroso derribo a Lucumí dentro del área. Lenis se plantó en el punto de penalti dispuesto a hacer justicia, pero, de nuevo, le falló la puntería. La quiso ajustar demasiado y su disparo se marchó por la línea de fondo.
Todo un varapalo para los de Jorge Almirón, a los que les faltó gol para poder sorprender a Bolívar en su fortín.