Alemania puede estar contenta. Ha ganado la Copa Confederaciones, el Balón de Oro del torneo, la Bota de Oro y el premio al 'fair play'. También el 'MVP' de la final fue alemán.
El único galardón que cayó en mano de un jugador no alemán fue, nunca mejor dicho, el Guante de Oro, pues fue a parar al arquero chileno Claudio Bravo.
Y es que el capitán de Chile se lo arrebató a Ter Stegen por su monumental partido ante Portugal. Ese fue el partido que, a buen seguro, privó a Alemania de hacer el 'Grand Slam' en esta Confederaciones.