La aparición de una pegatina en la grada visitante del estadio de Montilivi ha desatado una gran polémica en las redes. En ella se ve a Anne Frank con la camiseta del Barcelona, un recurrente 'meme' antisemita del que la afición del Espanyol no ha tardado en desmarcarse.
No es la primera vez que estas pegatinas aparecen en el mundo del fútbol. Fue un escándalo mundial cuando los ultras de la Lazio se la 'dedicaron' a sus rivales de la Roma, y también ocurrió en España, a las puertas de otro derbi, en este caso el de Salamanca.
Vestir a Anne Frank, la niña judía víctima del Holocausto, con la camiseta del rival es algo más que una broma de mal gusto, y se ha vuelto a hacer.
Al parecer, fue obra de varios ultras del Espanyol en su visita a Montilivi, pues más allá de que aparecieran en las gradas de la zona visitante, tuvieron la poca cabeza de posar en la previa al partido con botellines de cerveza a los que habían adherido la infame pegatina.
El Espanyol, por el momento, no se ha pronunciado al respecto, una actitud que le ha costado no pocas críticas, empezando por la cuenta de Twitter que denunció lo sucedido en primer lugar.
El Girona procedió a su retirada inmediata en cuanto tuvo constancia de su existencia. Según el diario 'AS', tras consultar al club gerundense, fueron ocho las pegatinas retiradas del sector visitante de Montilivi.
El mismo medio asegura que quienes las pegaron fueron cuatro individuos sin vinculación con ninguna peña espanyolista, que se sepa, y con entradass de otro sector del estadio, pero que fueron redirigidos por los Mossos al sector visitante al portar bufandas y camisetas del Espanyol, para tenerlos bajo control.