Un empate insatisfecho

El Eibar y el Athletic firmaron un resultado que no sirve a ninguno de los dos. Ni a los 'armeros', que no se alejan del descanso más que un punto, ni el cuadro rojiblanco, al que se le escapa Europa.

Tuvieron los dos conjuntos ocasiones para hacerse con los tres puntos. Primero dominó el conjunto de Garitano, que por medio de una mano se encontró con un penalti que no esperaba.

El Athletic se puso por delante gracias a Raúl García, que apuró tanto la pena máxima que a punto estuvo de perder. Pero, al igual que contra el Atlético, su ventaja duró muy poco.

Reaccionó el Eibar, adelantó líneas y comenzó a encimar el área de Unai Simón. El gol del empate llegó con un Sergi Enrich que nunca dejó de creer en el robo, se la dio a Orellana, este centró al segundo palo donde apareció Pedro León y, finalmente, Kike García remató con la nariz.

Sesteó el encuentro por momentos. Todavía es pronto para calibrar los esfuerzos y los jugadores lo pagan caro. Poco más allá de un acercamiento peligroso antes de pasar por vestuarios.

Después del descanso, el Athletic dejó hacer al Eibar. Sacó Garitano a Williams para montar unas contras que no encontró y permitió a los 'armeros' tener la posesión y llegar a las zonas peligrosas.

Tanto fue el cántaro a la fuente que al final se acabó rompiendo con la misma moneda del Athletic, el penalti. Dani García pecó de novato y agarró a Escalante. Tras revisión en el VAR, Prieto Iglesias pitó la pena máxima y permitió a Orellana soñar con alejarse del descenso.

Pero el Athletic, al igual que hiciese el Eibar en la primera mitad, no dejó que el golpe le hiciese daño. Villalibre, que entró justo antes de que se lanzase el penalti, metió con el muslo un gol que sería el definitivo para el resultado.

Finalmente hubo reparto de puntos, un empate que no contenta al Eibar y que aleja aún más al Athletic del sueño europeo. En un derbi algo descafeinado, los goles pusieron la emoción.