Tottenham y Chelsea vuelven a verse las caras en la EFL Cup, una competición en la que hace 12 años salieron victoriosos los 'spurs'. Lo más destacado de esa final fue el gol definitivo de Jonathan Woodgate, que firmó su único título después de haber jugado con el Real Madrid y no haber tenido suerte. En 2015 la reeditaron, aunque con triunfo 'blue'.
Después de una larga espera, Tottenham y Chelsea se enfrentan este martes en un partido vibrante de octavos de final de la EFL Cup y no hay margen para el error.
Hay que mirar atrás para ver un partido de estas características entre ambos conjuntos. En 2008, la final de esta competición acabó con victoria 'spur' por 2-1, el que a la postre sería su último trofeo conquistado hasta la fecha.
Se adelantó Didier Drogba, pero Dimitar Berbatov y Jonathan Woodgate decantaron la balanza para el Tottenham. El gol del ex del Madrid, que ganó su único título, fue bastante cómico.
El partido marchó 1-1 a la prórroga y el zaguero, en el 4' de la primera parte, finiquitó el choque con un gol con bastante fortuna. El balón impactó en el portero y el rebote fue a parar a su cabeza, lo que hizo que el balón acabase en el fondo de las mallas.
La locura se apoderó de los 'spurs' y de Woodgate, que a buen seguro que recordó lo que le pasó en España. No hay más que mirar hacia atrás y ver que las lesiones acabaron lastrando su carrera en el Madrid.
Tampoco estuvo demasiado afortunado cuando jugó en el equipo 'merengue'. Disputó únicamente 916 minutos y fue más protagonista por pifias que por cosas buenas.
El día de su debut, el 22 de septiembre de 2005, acabó marcando un gol en propia meta y encima fue expulsado por doble amarilla. Para olvidar, como los 12 años de sequía del Tottenham.
Ya sin el defensor de cristal, en 2015, Chelsea y Tottenham volvieron a verse las caras, aunque ahí se cobraron venganza los 'blues' merced a los tantos de Terry y Diego Costa para el 2-0 final.