Mario Balotelli firmó un auténtico golazo a favor del Adana Demirspor para recortar las distancias con el Besiktas. Tras el tanto, le hizo un gesto a Sergen Yalcin, técnico rival que en el pasado aseguró que el italiano no tenía cerebro.
Aunque Mario Balotelli no conserva el nivel que tuvo hace varios años, todavía tiene mucho que ofrecer. En el último encuentro que disputó en Turquía, el italiano firmó un golazo con su sello inconfundible durante el encuentro entre el Besiktas y el Adana Demirspor.
El delantero perforó la meta de Ersin Destanoglu en el minuto 79 con un auténtico trallazo con la pierna derecha. El disparo desde la frontal del área se convirtió en un cohete teledirigido que limpió las telarañas de la portería rival.
Durante la celebración, el atacante se acercó a los banquillos e hizo un gesto señalando su cabeza. Esta acción iba dirigida al técnico Sergen Yalcin, que en su día argumentó que el italiano no tenía cerebro.
Aún hubo más, ya que asistió a Assombalonga en el tiempo añadido para cerrar el empate a tres. Tras el pitido final, Balotelli provocó una tangana con el cuerpo técnico del conjunto rival mientras se retiraba a los vestuarios.