El Nottingham Forest solventó su ‘final’ de este domingo contra el West Ham (1-2) no solo para sobrevivir en la competencia por la Liga de Campeones, sino para agitarla a falta de una jornada, en la que el conjunto de Nottingham se lo jugará todo en un duelo directo con el Chelsea en The City Ground.
Ahora mismo, a falta del choque entre el Arsenal, con 68 puntos, y el Newcastle, con 66, que se disputa esta tarde en Londres, el 4º es el Chelsea con 66; el 5º es el Aston Villa también con 66; el 6º es el Manchester City, con 65 y un partido menos; y el 7º es el Forest, con 65.
El equipo de Nottingham necesitaba ganar al West Ham. Y lo hizo. El 0-1 fue un ‘regalo’ del portero Alphonse Aréola. En su salida de balón con el pie, entregó su pase al borde del área a Morgan Gibbs-White, que aprovechó el tremendo error para adelantar a su equipo en Londres, en el minuto 11.
Antes del descanso, el Forest sufrió un susto. Murillo se fue del terreno de juego ayudado primero por los servicios médicos y después en camilla, sin poder asentar el pie derecho en el suelo. Su lesión apuntaba al tobillo derecho. Pidió el cambio de inmediato. Su dolor era visible. Pero siguió en el encuentro tras la reanudación.
Y a la hora de partido, un lanzamiento de falta de Anthony Elanga fue rematado por Milenkovic para el 0-2, El tanto estuvo en duda entre la revisión del VAR y la posible influencia de algún jugador situado en fuera de juego. Finalmente, tras minutos de comprobación, se confirmó el segundo tanto y el triunfo del Forest, que sufrió un final apurado con un golazo de volea de Jarrod Bowen y con una tensión desbordada entre ambos equipos.