La rueda de prensa de Sergio González de este jueves tuvo un tema estrella: Takefusa Kubo. El nipón, vinculado al Valladolid, finalmente jugará en el Mallorca. El entrenador del Real Valladolid se lavó las manos al respecto, asegurando no haberlo ni siquiera podido valorar.
"Yo no tengo nada que decir de Kubo. A mí no se me ha dado la opción de poder valorar a Kubo. Todo lo que habéis dicho vosotros y Pedrerol, que le estáis dando una importancia…", dijo Sergio, al ser cuestionado por el jugador japonés del Real Madrid.
Aseguró que ha sido decisión del jugador, no suya. "Parece que haya escrito misa. Ha dado una opinión, una información, en la que no ha venido por aquí, entonces, si Kubo ha decidido irse al Mallorca, habrá pedido sus consejos para ir allí", afirmó.
Pero la rueda de prensa tuvo más temas. Porque el Valladolid juega este sábado en el Bernabéu, un estadio que se le da históricamente mal, pero al que llega con el subidón de moral que supone haber ganando al Betis en el Villamarín.
"Vamos con muchísima ilusión, con un refuerzo importante tras la victoria del otro día, sabiendo que no hicimos un grandioso partido, sino que fue correcto, pero sabemos que podemos hacerlo mejor", explicó.
Pese a todo, Sergio se mostró crítico con su equipo. "Con una lectura positiva, cuando ganas se trabaja mejor, los futbolistas tienen más ganas de escucharte, de oir las posibles soluciones al partido. La victoria es un refuerzo, pero no fuimos el Valladolid que queremos ser", aseguró el técnico blanquiviolea.
"Siempre es más fácil crecer desde una victoria que desde una derrota. Con el partido que tenemos ahora no hace falta ni tener una charla con ellos. Partido muy motivante ante un rival de la élite, de los tops, queremos competir, como siempre, como equipo", agregó.
El curso pasado el Valladolid jugó muy bien en el Bernabéu, pero cayó derrotado 2-0. "Nos vale para quitarnos el temor de ir a un campo como es el Bernabéu. Para no tener tanta sensación de sometimiento", dijo.
"Tenemos que buscar el equilibrio, saber que somos capaces de hacerlo bien, pero que el Madrid es un rival muy fuerte que aunque estemos muy bien como el año pasado nos va a minimizar mucho", continuó.
"Al final todos sabemos los recursos y virtudes que tienen, que son muchísimos. Hay que intentar minimizarlo y, por qué no, tener el descaro de ir a por su portería para que ellos también vean que tienen que correr hacia atrás, que se pongan nerviosos", apuntó también Sergio, al respecto de la visita.
Negó seguir dolido por la derrota. "No, me fui rabioso, como todos. Fue una derrota inmerecida, pero me quedo con lo que se vio en el campo. Creo que si este año hacemos lo mismo seguro que volvemos con una sonrisa", explicó.
Fue cuestionado a continuación por las bajas de ambos equipos. "Yo hablo por las mías, y son dos futbolistas muy importantes. Sandro ha venido muy bien, con muchas ganas, con mucha ilusión, humildad, viéndose protagonista, pero Enes Ünal lo puede suplir bien", respondió.
"El tema de Rubén Alcaraz es una posición más complicada porque no tenemos un futbolista con el perfil como el que tiene él, es el ancla del equipo, pero tenemos otros futbolistas que tienen ganas de demostrarnos cosas", reconoció el entrenador del Valladolid.
Y acabó esperanzado de poder sacar algo positivo del feudo 'merengue'. "Nosotros siempre que preparamos un partido lo hacemos para ganarle, buscamos las debilidades de los rivales para convencer al futbolista de que se puede ganar", respondió.
"Yo creo que tenemos que pensar en jugar a lo nuestro, combinar por dentro, por fuera, abrirles el campo y saber que las vigilancias defensivas son súperimportantes", dijo Sergio, para finalizar.