El debate de la semana en España es si el añadido del Espanyol-Atleti fue o no correcto. Más allá de opiniones personales, parece ser que desde el CTA se había advertido a los clubes de que las pérdidas de tiempo tendrían consecuencias.
El diario 'Sport' explica que Velasco Carballo, presidente del Comité Técnico de Árbitros, advirtió a los clubes de esta tendencia. "Hay que mejorar en la aplicación del tiempo añadido, pero hay que ver qué pasa y el motivo por el que se ralentiza todo en esos minutos", dijo, en su momento.
Según el citado medio, LaLiga es el campeonato de Europa en el que más tiempo se pierde (o, dicho de otro modo, en el que menos tiempo está el balón en juego). Y, para muestra, el Espanyol-Atleti.
El equipo 'perico' se quejó amargamente, con una pataleta que le salió por la culata datos en mano, del alargue de diez minutos que Juan Martínez Munuera decretó en el 90'. Pero sumando los minutos perdidos entre el VAR, los cambios y las lesiones, el colegiado se quedó corto.
De los segundos 45 minutos, casi 13 estuvo el balón parado. Es decir, se jugaron solo 32 de los 45 reglamentarios. Y eso, lamentablemente, es lo habitual en LaLiga.
Martínez Munuera se ciñó a lo que dicta el reglamento, 30 segundos por cambio y un minuto por cada asistencia médica, más el tiempo perdido en revisiones del VAR. Echó cuentas y añadió diez. Y se quedó corto.
El Atlético ya está habituado este curso a los añadidos interminables, y no precisamente siempre con el viento a favor. En la primera jornada le tocó lidiar y aguantar la ventaja lograda en Balaídos en un alargue de once minutos. Ante el Elche se añadieron seis y cinco contra el Villarreal, otro partido en el que los rojiblancos salvaron los muebles en el último suspiro.