El Chelsea está apostando al 100% por el proyecto de Mauricio Pochettino. En el estreno en la Premier League contra el Liverpool, el entrenador dibujó un esquema que adelantó cuál va a ser el eje de los 'blues' esta campaña: Enzo Fernández. Rodeado de los jugadores adecuados, puede alcanzar su máximo nivel y comandar Stamford Bridge de vuelta a lo más alto de la élite inglesa. Esto es justamente lo que está haciendo la dirección deportiva, que ha cerrado los fichajes de Moisés Caicedo procedente del Brighton & Hove Albion y Roméo Lavia desde el Southampton. ¿Cuál será su acomple en la alineación? ¿Qué impacto causarán? BeSoccer Pro se dispone a estudiarlo.
Primero, eso sí, conviene ojear la inversión que está llevando a cabo la directiva de Todd Boehly. Los recién llegados centrocampistas han costado 133 y 68 millones de euros respectivamente, lo que subraya las palabras 'Fair Play Financiero' en el subconsciente de cualquier aficionado. Los londinenses están aprovechando el sistema de la UEFA para firmar contratos de larga duración a sus nuevos refuerzos en fin de amortizar el pago de sus traspasos a lo largo de las campañas por las que se han comprometido. Así, el gasto, dividido en ejercicios y con opciones de repartirse en un máximo de 5, es más fácil de aliviar, máxime con que se cierre alguna que otra venta o haya bonanza en otras lindes comerciales.
Hay un ejemplo sonado y de consecuencias negativas de un mal manejo de este recurso financiero. La Juventus, este curso, fue sancionada con la pérdida de 15 puntos en la Serie A. Las unidades se vieron restauradas más adelante y, un tiempo después, se restaron otras 10 de su casillero. El motivo, el 'caso Plusvalías', una serie de aumentos en las cantidades que la 'Vecchia Signora' registró por las salidas y entradas de varios profesionales con el fin de beneficiarse de ese mismo recoveco del reglamento descrito en el párrafo anterior. Los mandamases europeos detectaron que los 'bianconeri' habían realizado de forma anómala estas prácticas y los descalificaron de la Conference League.
Volviendo al Chelsea, recuerde el lector que estas líneas se han propuesto para comprender el porqué económico de las llegadas de Moisés Caicedo, Christopher Nkunku, Nico Jackson, Robert Sánchez, Axel Disasi, Lesley Ugochuwku, Angelo y el más reciente, Roméo Lavia. Ahora, toca ahondar en el porqué deportivo centrado en el mediocampo, es decir, en cómo el ex del Brighton y la otrora perla del Southampton pueden ensalzar las características de Enzo Fernández y desplazar a Conor Gallagher. El canterano 'blue', probablemente, seguirá siendo una pieza importante para Mauricio Pochettino, pero es difícil no imaginarle por detrás de sus compañeros en el orden de prioridades de la pizarra.
Pivote renovado y con fluidez en la salida
En el estreno contra el Liverpool, si bien Conor Gallagher cuajó una actuación más que digna, brillando, principalmente, en la segunda parte, sufrió en la primera para ayudar a sacar la pelota desde atrás. Tuvo que contar con el apoyo de Enzo Fernández, que, conforme más lejos jugaba de los tres cuartos de campo, menos daño era capaz de hacer a la defensa de Jürgen Klopp. En el desarrollo del partido, hubo varias evidencias de cómo el ex del Benfica es capaz de romper líneas al primer toque o con un control apurado de balón seguido de una apertura a la banda, un pase entre líneas o un cambio de ritmo para volcar a los zagueros contrarios al otro extremo del verde.
Sin una garantía de circulación en el pivote, el argentino seguirá viéndose forzado a retrasar su situación en el campo, algo que no debería ocurrir con Moisés Caicedo a su zaga. El ex del Brighton, atendiendo a sus 'stats' de la temporada pasada, presenta un porcentaje de pases con éxito del 51.4% que es más atinado en casi un 10% que los de Gallagher -34.6%- y Roméo Lavia -33.7%-. Nadie se acerca, eso sí, al dato de Enzo -61.5%-.
El otrora pupilo de Roberto de Zerbi ha aprendido, con el maestro italiano, a que muchas de las pelotas que hace llegar a sus compañeros, 6.4 por cada 90 minutos, sean progresivas, de modo que es el útil ideal para ayudar a Fernández a verse más aliviado en estas labores. Los promedios, en este apartado, de Gallagher -4.2- y Lavia -4.6- son claramente más discretos y, una vez más, los del incorporado el pasado invierno resaltan ante el resto -9.9-.
El ecuatoriano, para redondear un perfil que le viene de perlas a Mauricio Pochettino, es, de los 4, el 2º que menos pérdidas de balón sufre, 7.5, es decir, 0.6 más que Lavia -6.9- y alrededor de 2 menos que Enzo -9.4- y Gallagher -9.3-. No debe concebirse como parte de un plano negativo esta cifra en el caso de quienes ya estaban en el Chelsea con anterioridad. Es comprensible que los rivales tiendan a quitarles más la pelota, pues están acostumbrados a arrimarse más a la portería contraria. Es un riesgo que no necesita ser anulado, ya que es consecuencia de un atrevimiento fundamental en el ataque, sino cubierto por compañeros que den seguridad a su espalda.
Perfiles más defensivos para hacer crecer la ofensiva
Si bien, en el apartado anterior, es Moisés Caicedo quien más ha resaltado, es el turno de Roméo Lavia cuando se trata de guarismos defensivos. Es el líder de esta suerte de competencia entre los 4 jugadores de Pochettino en intercepciones, con 4.6 por las 3.5 de Caicedo, las 3.1 de Enzo y las 3.8 de Gallagher, y en recuperaciones, con 9.5 por las 9.4 de Caicedo, las 7.7 de Enzo y las 6.7 de Gallagher. En 1x1 defensivos con éxito, curiosamente, el argentino vence a sus compañeros tímidamente, aunque sin llegar siquiera a la unidad por 90 minutos.
¿Cómo aprovechará el Chelsea la irrupción de un futbolista como el ex del Southampton, con tal despliegue destructor del juego del rival comparado con los demás centrocampistas del equipo? Posiblemente, situándole más atrasado incluso que Caicedo y Enzo en una hipotética pizarra con 3 hombres en la medular donde se explote la contundencia del canterano del Anderlecht, la seguridad del ex del Brighton y el dinamismo del campeón del mundo en Catar.
Inevitablemente, esto supondrá desplazar a Gallagher a un puesto secundario, pues es complicado imaginarle ganándole la titularidad a un Enzo en quien se invirtieron 121 millones de euros para sacarle de la Liga Portuguesa. El talento formado en la estructura deportiva de Stamford Bridge, eso sí, le gana en sus promedios de tiros -1.4 vs 1.3- y en regates con éxito -2.4 vs 0.9-, pero no hay demasiadas opciones de que el cuerpo técnico vea diferencias en el apartado de disparos y, si las ve en el de rebases al rival, puede depositar esta responsabilidad en Raheem Sterling, Carney Chukwuemeka o Mykhailo Mudryk.
Si Pochettino consigue hacer de su centro del campo un armazón custodiado por el tridente Lavia-Caicedo-Enzo y las prestaciones de Gallagher como seguro para entrar en la rotación, este Chelsea puede ser de lo más interesante y una apuesta firme a acabar en los primeros puestos de la Premier League. Visto el gasto en el mercado de fichajes, eso sí, los mandamases de Stamford Bridge no pensarán solo en un 'top 4', sino en un primer puesto, máxime cuando los premios deportivos serán claves para sostener el dinero empleado.