El Real Madrid no pudo iniciar la pretemporada con victoria. El conjunto blanco, que todavía necesita rodaje, cayó en Escocia ante el Rangers y eso que llegó a adelantarse en el marcador (2-1).
La anécdota más curiosa del partido tuvo lugar sobre el final. El árbitro terminó por añadir cuatro minutos al encuentro y Ancelotti se cabreó bastante, algo que parece que el colegiado conoció.
¿Por qué? Porque el encuentro concluyó en el minuto 91. El italiano saludó a Gerrard de forma amistosa y luego se acercó hasta el cuarto árbitro porque consideraba excesivo el añadido.