Según el acuerdo adoptado tras una reunión de urgencia, la Comisión Antiviolencia, presidida por Llorenç Salvá, también estudiará la posibilidad de personarse en el procedimiento judicial penal o administrativo abierto como consecuencia de los hechos, señala un comunicado.
Asimismo, informará de los incidentes ocurridos a la Delegación de Gobierno de Baleares y abrirá "un periodo de análisis" con el objetivo de proponer medidas de carácter preventivo para erradicar la violencia en el fútbol, así como el racismo y la xenofobia.
La riña multitudinaria entre padres se registró en el partido de la categoría infantil entre el equipo local, el Alaró, y el Collerense.
Una grabación de la pelea muestra imágenes de acciones muy violentas, con patadas, puñetazos e insultos que comenzaron en las gradas y finalizaron en el terreno de juego.
Varios de los padres que intervinieron en la pelea fueron atendidos de heridas leves, y algunos interpusieron denuncias ante la Guardia Civil de la localidad de Inca.
Las instituciones públicas de Baleares, la Federación Territorial de Fútbol y los propios clubes afectados han condenado los lamentables hechos.