Antes había pasado por Celta y Albacete, pero Diego Costa eligió Valladolid para tratar de tener minutos en Primera División. Y así fue. Disputó un total de 36 encuentros, 32 de ellos como titular en el cuadro pucelano.
A sus 21 años, el delantero ya hizo denotar su relación con el gol: marcó nueve y repartió cuatro asistencias. Algo que hizo creer al Atlético de Madrid, que no tardó en darle la oportunidad en el primer equipo -después pasaría una temporada cedido en el Rayo-.
Tras una buena primera parte de la temporada, el Valladolid pegó un bajón que acabó con el puesto de Mendilibar. Ni Onésimo ni Clemente lograron evitar el descenso del equipo. Pero fue una etapa que le formó como futbolista.
Una década después, Diego Costa visitará una vez más el José Zorrilla con el objetivo de ser más letal en ataque. Tras siete jornadas, el atacante solo ha podido ver puerta en una ocasión.
Una falta de gol que está notando el Atlético, que solo ha sumado siete dianas hasta el momento, siendo el peor en este sentido de los seis primeros clasificados en Liga.