Ronald Araujo se rompió el pómulo en el partido de Liga contra el Atlético de Madrid. La fractura es pequeña, nada grave, y no habrá impedimentos para que juegue el próximo encuentro del Barcelona, que será contra el Girona en Montjuïc. La cita se presenta exigente porque, esta temporada, los de Míchel están, al menos hasta ahora, pugnando por el liderato del campeonato doméstico. La victoria sería una caza mayor.
La lesión del uruguayo no se supo por un comunicado médico de su club, sino por una información de 'Sport', que indica que la situación del defensa es un simple desaguisado y que se ejercitará con normalidad esta semana. Lo que no queda claro es en qué momento se hizo la avería frente a los 'colchoneros', pues, con la adrenalina, no notó nada en el instante del impacto. Cuando estaba en frío, empezó a reparar en ello y los galenos azulgranas le examinaron.
Hay una acción que podría explicar su molestia y es una en la que peleaba por la pelota con Marcos Llorente, que dirigía una contra rojiblanca. Se cayó de bruces, amortiguó el choque con el césped extendiendo las manos hacia delante y su rival, sin darse cuenta, le pegó una coz. Estaba moviendo las piernas en una mecánica natural del cuerpo por cómo corría: en una zancada, le dio al 'culé' en la cara con el talón.
La rotura de Ronald Araujo no es sino el efecto de su trabajo en el campo, donde las distancias suelen ser cortas con los contrincantes. En el partido contra el Atlético, en concreto, le tocó hacer de central porque, durante el calentamiento, Íñigo Martínez se lesionó, así que Xavi prefirió que Jules Koundé se quedara en el lateral derecho porque Andreas Christensen no es de tal empaque físico y era necesaria una apuesta contundente para contener a Álvaro Morata y compañía.
December 3, 2023