Tras un inicio dubitativo de competición, Osasuna ha visto relanzada su dinámica en Liga con el inicio de 2019 y ya son segundos, con 47 puntos, uno por debajo del Albacete.
La culpa de ello la tiene Arrasate, el entrenador 'rojillo', y el gran clima existente entre equipo y afición que se ve reflejados en los resultados en casa.
Desde el comienzo del año, Osasuna ha ganado sus últimos cuatro partidos y lo que es más sorprendente, no ha recibido ningún gol. Nada con ver con los primeros compases del equipo en el pasado verano, cuando tuvo que esperar hasta la jornada para lograr su primer triunfo.
Además, Osasuna ha encarrilado sus últimos ocho partidos en casa con ocho victorias consecutivas. Con su victoria este fin de semana en El Molinón, los de Arrasate se consolidaron en las posiciones altas y reivindicaron sus expectativas de alcanzar la Primer División a finales de la presente temporada.
11 de febrero de 2019