La ocasión pintaba propicia para que Boca Juniors sumase una victoria en la visita de Arsenal a La Bombonera. Los de Sarandí acumulaban 16 partidos sin ganar como equipo visitante. Además, su poca efectividad como local los había abocado a la penúltima posición de la Zona B en este inicio de curso.
Además de todo esto, estamos hablando del día en el que el conjunto de Buenos Aires cumplía 117 años. Con estas premisas, todo parecía indicar que el triunfo local llegaría más tarde o más pronto.
Como era de esperar, el equipo dirigido por Sebastián Battaglia llevó la manija del encuentro desde el principio. Pese a que las ocasiones brillaban por su ausencia, el 'Azul y Oro' dominaba en todas las zonas del campo.
No obstante, la primera clara fue para el conjunto visitante. Figal, al intentar despejar un centro desde la derecha, terminó estrellando el balón en su propia portería. La respuesta llegó unos minutos más tarde con un zurdazo de Salvio desde la frontal del área que se marchó algo desviado.
Este aviso fue la antesala del 1-0. Sebastián Villa se zafó de sus opositores y le cedió el balón a Vázquez. El delantero no se lo pensó dos veces y se sacó un zapatazo que, pese al palmeo de Werner, terminó entrando por la escuadra.
El tanto renovó las energías de un Boca Juniors que salió al campo en la segunda mitad con ganas de matar el encuentro. Así, el propio Salvio tuvo una tras la reanudación al tirarse con todo al suelo para intentar cazar un dentro al segundo palo. Werner, de nuevo muy atento, detuvo con seguridad.
Daba la sensación de que el 'Xeneize' podía dar una marcha más, pero se conformaba con lo que había, casi como dando por hecho el triunfo. Este pensamiento lo aprovechó Lomónaco para establecer el empate, tras aprovechar un balón que le llegó rebotado del palo para anotar a puerta vacía.
Cinco minutos más tarde llegó el momento de la polémica. El colegiado, a instancias del VAR, señaló un penalti sobre Marcos Rojo que, sinceramente, cuesta de ver. El central asumió la responsabilidad de tirarlo y no falló. 2-1 y un cuarto de hora por delante.
Pero ni 60 duró la alegría para la hinchada local. Un grave error de Rossi en la salida de un centro fue aprovechado por Colman para, de cabeza, poner el 2-2 en el electrónico.
Los últimos minutos fueron un quiero y no puedo por parte de Boca. Battaglia dio entrada a Benedetto, que respondió con un gol en el 87'. Eso sí, el 'Pipa' se encontraba en claro fuera de juego.
Al final, un empate que deja mucho más contento a Arsenal, mientras que el equipo de la capital argentina tuvo que conformarse con una fiesta de cumpleaños a medio gas.