Mikel Arteta tuvo que tomar una decisión complicada a la hora de hacer la lista de convocados para competiciones europeas y le tocó dejar fuera a Özil. Se habló mucho sobre que este podría ser un gesto para demostrarle que no cuenta con él, pero nada más lejos de la realidad: el entrenador lo explicó.
"No es el único que se ha quedado fuera. Fue una decisión muy complicada de tomar para mí, pues dejar jugadores fuera del equipo al nivel de que sepan que no van a poder participar pase lo que pase es muy duro", dijo en declaraciones recogidas por medios ingleses como 'Mirror' o 'talkSPORT'.
"No me gustó nada tener que hacerlo, pero teníamos un exceso de jugadores extranjeros y, desgraciadamente, tuve que tomar esa decisión", dijo además. Esto pone fin a la polémica suscitada no solo por su exclusión, sino por los análisis de Arsène Wenger que dejaron caer que estaba desaprovechado.
"Creo que es un desperdicio para él. Primero, porque está en esos años en los que un jugador puede sacar el máximo provecho a su talento, y segundo, creo que es un desperdicio para el club porque es un talento extraordinario, un jugador muy creativo en el último tercio del campo que puede dar ese último pase matador", dijo el ex técnico 'gunner'.