Antes de la salida al campo, Julen Lopetegui y los jugadores concentrados intentaron calmar los ánimos, pero Piqué y Ramos se han distanciado definitivamente. El capitán del Madrid ya opinó días atrás que los 'tuits' de Piqué "no son lo mejor para el grupo".
Piqué se manifestó el domingo a favor del referéndum y se emocionó a la hora de valorar la reacción policial del Gobierno para impedir la consulta. "Si lo consideran oportuno, doy un paso al lado", dijo tras el partido ante Las Palmas.
La postura política de Piqué ha generado un ambiente enrarecido en la concentración de España y fuentes de la Federación señalan a 'AS' que no se descarta que abandone incluso la concentración de cara a los duelos ante Albania e Israel.
Por si fuera poco, Piqué llegó a Madrid y lo primero que hizo fue ironizar con la actuación policial en Cataluña. Otra maniobra que no ha gustado al grupo que busca un clima positivo ni tampoco a un Ramos con el que siempre ha mantenido una tensa relación.
"No es descartable una renuncia de Piqué antes del viernes", insiste 'AS' citando a fuentes federativas. Tras esta reunión en el vestuario, Piqué saltó al césped y recibió insultos de todo tipo y vio pancartas que lucían proclamas como "eres vomitivo".
23 minutos de muestras de odio para un futbolista que se encuentra en la diana por, primero, sus puyas al Madrid y, segundo, sus ideales políticas. El ambiente en España se vuelve irrespirable pese a que Lopetegui intenta calmar unas aguas que bajan turbias.