Parecía que estaba en otro lugar, en otra época, pero Asensio ha despertado a tiempo. El mallorquín, al que se le pedía que espabilase, cuajó un gran partido este sábado frente al Eibar y confirmó que sí que está.
El atacante completó unos más que buenos 61 minutos y le dio tiempo incluso a marcar un gol, y eso que incluso anotó otro, de tacón, pero se lo acabaron anulando por estar en posición antirreglamentaria.
Era su tercer partido consecutivo marcando y eso ya es algo a destacar, cuando hace un tiempo atrás se le criticaba porque apenas participaba en el ataque y en el juego de su equipo.
Asensio era consciente de que tenía que dejar de ser intermitente para intentar liderar al Madrid ante lo que se le viene encima. Y el '11' respondió a la llamada con creces.
El tanto que firmó ante el Eibar fue extraordinario. Recibió un gran balón, se lo echó hacia adelante con un toque (sorteó a un defensa) y batió con la zurda medio cayendo a Dmitrovic.
La chispa de Asensio está encendida y eso es una gran noticia de cara a lo que se le viene encima a los blancos: eliminatoria contra el Liverpool y 'Clásico' en Valdebebas.