El San Fernando empezaba su partido por debajo en el marcador, ante un Yaiza que ponía de los nervios a los de Tino Déniz, sabedores del resultado del día anterior de su rival al campeonato, pero lograron remontar el partido, y en el último suspiro los lanzaroteños igualaban, dejando con la hiel en los labios a los de San Bartolomé de Tirajana.
El Tenerife B perdía la oportunidad de sumar de a tres, tras empatar en el Villa Isabel en un partido sin goles, aburrido y soso, según los aficionados allí presentes, ante un Ibarra, que igualmente deja escapar la opción de consolidarse en la quinta plaza, la que puede tener premio al final de la temporada.
El Buzanada necesitaba ganar para ir alejando fantasmas clasificatorios, y lo hizo ante el filial de Las Palmas, que encadena dos derrotas consecutivas, y que escapó la plaza tras la derrota del Mensajero, que se vio superado por un Lanzarote que ya es quinto, y que le dejó en ridículo en el Barrando de Los Dolores.
El Santa Úrsula sigue pensando en la quinta plaza, se lo toma muy en serio, y lo demuestra sacando adelante sus partidos, tenía una prueba dura ante un equipo que le va el futuro en la categoría, y la superó venciendo al cada vez mas desahuciado Haría con doblete de Stéfano, del canterano Salva.
El Santa Brígida, con dos partidos menos, es octavo, imagina, con la cuenta de la lechera sumar y poder acercarse a esa fase de ascenso que buscaba como objetivo al inicio de la temporada.
El viernes debía abrir la jornada, en el Valle de Aridane, pero los vientos en el aeropuerto de Mazo le impidieron salir de Gran Canaria. Habrá que hacer encaje de bolillos para ir cuadrando ya tanto partido aplazado.
Las Zocas tampoco quiere dejar escapar la oportunidad de "bailar" con los mejores, hoy goleaba a domicilio a El Cotillo, equipo majorero que queda al borde del precipicio, mientras que el San Mateo da un paso gigante hacia la permanencia, que tiene ya virtualmente conseguida, después de salir victorioso en su partido ante el Tenisca, conjunto que agudiza su profunda crisis.
El Marino se trae tres puntos de permanencia del Municipal de Balos, instalación del municipio de Santa Lucía, en el que tuvo que jugar hoy como local el Estrella, por problemas de seguridad en la grada que tiene la visera de Las Palmitas, tras el último temporal de viento que azotó la zona suroeste de la isla de Gran Canaria.
Para el conjunto de Sardina del Sur, es una derrota de mucho riesgo, toda vez que su situación clasificatoria no anima al optimismo.
El Vera sorprendió a propios y extraños con una victoria necesaria ante un rival directo para seguir ajustando sus opciones de permanencia, sin buscar argumentos distintos a los deportivos, con los que han ido tapando su mala temporada. Hoy anotaban cinco tantos, su récord en la campaña ante el Unión Puerto, que al igual que su compañero de Maxorata, atisba el inminente peligro.