El Real Madrid conquistó la Supercopa en la tanda de penaltis después de una gran lucha con el Atlético, que se dejó el alma durante todo el partido.
Sánchez Martínez, el árbitro de la final, tuvo bastante trabajo en todo momento y cumplió con su cometido pero no fue tarea fácil.
La RFEF quiso mostrar a través de las redes sociales las horas previas del árbitro y de sus asistentes antes de dirigir el encuentro.