A la media hora de juego, los aficionados del Raimundo Sampaio ya habían celebrado dos goles de su equipo tras las anotaciones de Fred y Clayton. Lo que parecía una presa debilitada ofreció más resistencia de lo esperado.
De este modo, los visitantes consiguieron recortar distancias todavía en el primer tiempo por medio de Gustavo Ferrareis, acción que le daba esperanzas a un conjunto falto de fe y de moral.
Ya en los últimos diez minutos, Pratto encontró en Dátolo su mejor cómplice y cerraba el encuentro. Internacional deberá ponerse las pilas para salir del pozo, mientras que Atlético Mineiro debe seguir esta senda para intentar asaltar las dos primeras posiciones.