El Real Madrid ha colocado a Gareth Bale en el mercado, a sabiendas del gran cartel que todavía tiene en Inglaterra, desde donde llegó al Santiabo Bernabéu como el fichaje más caro de la historia blanca.
Seis temporadas y un carrusel de títulos envidiable después, el extremo galés podría hacer las maletas tras un curso horrible que ha motivado una revolución estival en la plantilla de Zinedine Zidane.
Sin embargo, Jonathan Barnett, agente del galés, destacó, según 'The Sun', que Gareth Bale no abandonaría el Santiago Bernabéu por menos de 19 millones de euros anuales. Una advertencia que ha espantado a sus pretendientes.
No obstante, el Real Madrid está dispuesto a faciltiar la salida del atacante de 29 años, dejándole escoger destino este próximo verano, siempre y cuando todas las ofertas sean más o menos parejas.
Aunque en Inglaterra aun recuerdan al Bale que deslumbró en Londres, las pretensiones de su representante le situarían como el segundo mejor pagado de la Premier League, solo superado por De Bruyne (21).
Cifras que no se corresponden con su aportación ofensiva, subrayando que hasta 33 futbolistas han aportado más esta temporada que los ocho goles y las dos asistencias del galés.
Aun así, la mayor duda en torno a Bale es su fragilidad física. Un rendimiento siempre bajo sospecha, tras encadenar hasta 22 lesiones diferentes, que le han privado de disputar el 47% de los minutos posibles con el Madrid.