Llevaba 16 años fuera de la Premier League, pero el Leeds United ha vuelto por sus fueros. La pizarra de Marcelo Bielsa funciona y maximiza a jugadores como Patrick Bamford, al que la confianza le acabará haciendo a este paso internacional.
Ante un rival lanzado como el Aston Villa, un 'hat trick' del delantero fue más que suficiente para bajarle los humos y colocar al Leeds en la zona alta de la tabla, oliendo los puestos europeos después de seis jornadas.
Es pronto, pero días así le dan cierto permiso para soñar a un Leeds que se mantuvo firme en un duelo igualado, pero en el que la diferencia la marcó ese creer en sí mismo descomunal de Bamford.
Y es que la primera parte estuvo dividida e incluso pudo irse al descanso perdiendo, porque Luke Ayling sacó bajo palos lo que parecía un gol seguro de Jack Grealish. Se fue desesperado el capitán, que lo intentó todo sin suerte.
Pero al final lo que mandó, como decíamos, fue Bamford. El de Newark on Trent aprovechó un rechace a disparo de Rodrigo en el 55' para empujarla, pero se ve que le gustan los retos y dejó otros dos golazos para todos los gustos.
En el 0-2, el '9' del Leeds armó desde la media luna un disparo seco y a la escuadra corta que ni vio Emi Martínez. Y para el 0-3, se coló entre cuatro jugadores, se zafó de dos y a los otros dos los burló con su disparo colocado.
Sentenciaba así Bamford el partido, aunque Bertrand Traoré, que entró por Trezeguet para buscar el gol, lo rozó con un disparo cruzado que acarició el poste. Tan cerca, pero tan lejos en un triunfo inapelable del Leeds.