El Betis acabó sacando tres puntos de San Siro ante un paupérrimo Milan. Los de Gattuso despertaron tras el gol tardío de Cutrone, y pudieron empatar el encuentro de no ser por una evidente pena máxima que Nijhuis no señaló.
Corría el minuto 89’ de partido. El Milan buscaba con ansia la portería de Pau López, con el objetivo de empatar el choque. Entonces llegó un envío al área que recogió Samu Castillejo, que inmediatamente se orientó hacia la puerta.
Cuando el malagueño ya había armado la pierna, Marc Bartra jugó la última carta de la defensa verdiblanca con una suerte más que discutida. El central metió el pie entre la pierna del jugador del Milan y el balón sin tocar el cuero, pero llevando a tierra a Samu.
Justo antes del descuento, un penalti para los ‘rossoneri’ habría cambiado el partido, pero así no lo quiso Nijhuis. El Milan protestó y protestó, pero finalmente no hubo penalti y el Betis se llevó unos merecidos pero protestados tres puntos.