Los aficionados de Deportivo Garcilaso no aceptaron el gol a falta decinco minutos para el final que eliminaba a su equipo y hubo una invasión de campo.
Estos hinchas acabaron sobre el terreno de juego para pegarle a los jugadores de Deportivo Llacuabamba, por lo que se vieron tanto bastonazos como patadas.
Los jugadores del equipo rival buscaron rápidamente cómo defenderse e irse corriendo a los vestuarios, pero salieron del campo en un cambión que la policía usaba para el transporte de los caballos.
Garcilaso, con este empate, ya se quedó sin oportunidades para seguir compitiendo en la Copa Perú.