La sorpresa ya no es una sorpresa. Es el campeón de la Bundesliga 2023-24. A falta de 5 jornadas para el cierre de la temporada en Alemania, el Bayer Leverkusen se proclamó nuevo ocupante del trono germano gracias a su holgada distancia sobre el Bayern de Múnich, 2º clasificado. No quedan los suficientes puntos en juego para que el equipo de Thomas Tuchel cuente con opciones de asaltar un liderato que se tintaba con su sello desde hacía varios años.
La tiranía del Allianz Arena llevaba vigente desde 2013, cuando sus camisetas volvieron a alzarse con el trofeo tras un doblete del Borussia Dortmund. El Signal Iduna Park ha desaparecido como la principal anternativa a un proyecto que esboza un cambio de estructura de cara al curso que viene para volver a la primera línea del fútbol continental y nacional. Las turbulencias en los despachos han influido en el césped a pesar de buenas decisiones como el fichaje de Harry Kane, que ha firmado una campaña sobresaliente, o taras como la dejadez con la renovación del contrato de Anthony Davies.
El caso es que los de Xabi Alonso han aprovechado cada error de los principales exponentes de su competición doméstica para que esta edición no fuera otra con una pieza más en sus vitrinas. De no haberse dado la irrupción del conjunto de Renania del Norte-Westfalia, Baviera, probablemente, se habría impuesto una vez más. Su más interesante némesis habría sido el Stuttgart con el Leipzig como tercera fuerza.
El Bayer Leverkusen ha dejado atrás a cualquier otra alternativa por su confianza en un entrenador 'inexeperto'. Se entrecomilla el calificativo porque es tan relativo como evidente su palmarés y su trayectoria en el centro del campo. Ha conocido las zonas medulares del Real Madrid, del Bayern de Múnich, del Liverpool, del Eibar y de la Real Sociedad y ha aprendido como oyente y partícipe de las pizarras de Rafa Benítez en su mejor momento, Manuel Pellegrini, José Mourinho, Carlo Ancelotti y Pep Guardiola. Su directiva no contactaba con un novicio cuando le telefoneó.
Hasta entonces, eso sí, su bagaje en los banquillos tan solo había conocido al filial de Anoeta, con el que emprendió 97 partidos y dio forma, poco a poco, a sus estrategias. Sin prisas, sin comprometerse con un proyecto de Primera División desde los orígenes de su trayectoria, sino respetando ese camino del ostracismo a los focos que enamora a cualquier aficionado, octubre de 2022 dio el pistoletazo de salida a, probablemente, uno de los mejores años de debut de un entrenador en el fútbol moderno.
Qué mejor conexión de lo presente con lo pasado que dando al club que depositó tanta fe en él la primera Bundesliga de su historia. Había quedado en 2ª posición en 5 ocasiones y en 3ª en 6. El dicho está mal escrito: a la 12ª va la vencida. El registro permite ponerse a la misma altura que el Nürnberg, el Eintracht Braunschweig, el Wolfsburgo y el TSV München en los libros del deporte rey alemán y hace justicia a una entidad que, en una clasificación ordenada desde los orígenes del campeonato, ocuparía el 10º puesto.
Esta Bundesliga no solo va de cifras
Por mucho que haya que recurrir a las cifras para contextualizar y agasajar esta Bundesliga del Bayer Leverkusen, su gesta no bebe de la numerología, sino de la táctica y la contemporaneidad del deporte. Xabi Alonso ha sabido adaptarse a la perfección a una tesitura actual en la que las demarcaciones son cada vez menos fijas sobre el terreno de juego, donde la efectividad en las áreas y en las transiciones marcan la pauta y en la que, contradictoriamente, jamás han estado disponibles tantas estadísticas sin poder usarse estas para ponderar tantos aspectos relevantes sobre el verde.
La interpretación de los laterales en la mesa de dibujo del técnico español es uno de los pilares de su éxito. Alejandro Grimaldo aterrizó procedente del Benfica el pasado verano. Formado en La Masia, conoció la mejor versión de su vida al ala de un estratega al que debe, en gran medida, ser uno de los candidatos firmes a la convocatoria de Luis de la Fuente para la Selección Española en la Eurocopa. Su profundidad y su juego ofensivo han hallado una nueva dimensión.
Jeremie Frimpong es el otro puñal de la retaguardia. Llevaba en plantilla desde enero de 2021, cuando una operación de 11 millones de euros le sacó del Celtic de Glasgow. Nacido en Ámsterdam, ha aprendido a coordinarse a la perfección con su compañero español para que las defensas de toda la Bundesliga no sepan nunca si cubrir al extremo, al carrilero que viene por detrás o a quienquiera que sea que aproveche el desorden para ocupar un vacío y explotarlo.
En este pulso, la presencia de Florian Wirtz se ha presentado crucial. Es otro de los mecanismos de este Leverkusen que lo convierten en una máquina tirana. Cada balón que pasa por sus botas adquiere colmillo. Muerden como lo hace este nuevo capítulo de la carrera de Granit Xhaka, que ha pasado de ser un valor totalmente asentado en el Arsenal a salir campeón de Alemania como báscula de unos centros del campo que ya probó en su etapa en el Borussia Mönchengladbach.
El germano ha conseguido que el principal exponente ofensivo de su equipo no lo sea a nivel de cifras. Victor Boniface protagonizó un inicio de campaña fulgurante, pero, poco a poco, fue reduciendo sus prestaciones delante de la portería -con una lesión de por medio- para extenderlas a su alrededor y hacer mejores a sus compañeros. Xabi Alonso recomendó el fichaje de Borja Iglesias para que su rotación le proveyera de mayor descanso y este movimiento se ha convertido en otra de las historias de la temporada. El cedido por el Betis ha pasado de un rol secundario a añadir el segundo título a su palmarés para acompañar a la Copa del Rey de 2022.
Xabi se gana el derecho a decidir
Con semejante irrupción en la élite, Xabi Alonso es un nombre que aparece en las agendas de los principales proyectos de Europa, máxime en un momento en el que han coincidido varios anuncios de marchas con meses de antelación: Xavi Hernández, Thomas Tuchel, Jürgen Klopp... El español era el candidato ideal para Anfield, pero él mismo se mostró favorable, ante la prensa, a continuar con el Bayer Leverkusen, con el que tiene contrato hasta 2026.
Conociendo su estilo elegante y discreto, es difícil imaginar que vaya a cambiar de parecer estos meses, más cuando su club está entregado a él y priorizará su criterio para que la plantilla y la estructura de la entidad se hagan a su imagen y semejanza en las próximas temporadas. ¿Qué caramelo más apetitoso que ser tan tenido en cuenta por los despachos hasta el punto de gozar de este poder de decisión?
El título de la Bundesliga le da el derecho a decidir sobre su carrera, que tan solo acaba de empezar, así que puede desligarse de las prisas por defender a uno de esos escudos que no dejarán de sonar para él hasta que se retire por el lazo que les une, principalmente el Real Madrid y el Liverpool. En Concha Espina, la afición ya fantasea imaginándole como el recambio de Carlo Ancelotti, que, vinculado hasta 2025, tendría que ampliar su estancia por una campaña más. Sería la transición perfecta.
Adelantar acontecimientos es inevitable en un caso tan sonado como el de Xabi Alonso, pero conviene paladear su presente más que bosquejar su futuro. Será mejor para el espectador, para el futbolista y para él. De hecho, su misión de esta temporada no ha concluido. Todavía puede hacer más histórico este trofeo, conseguido sin una sola derrota, con la consecución de un triplete. La Europa League y la DFB Pokal esperan. Su "farewell, beautiful game" no era un adiós. Era un hasta luego.
March 9, 2017