La primera mitad fue sinónimo de igualdad. Se vio mucho fútbol en Selhurst Park, pero no se llegó a cantar ningún gol. Las fuerzas entre ambos conjuntos estuvieron igualadas en todo momento aunque la jugada más peligrosa llegó de mano de Firmino en el minuto 6.
En la segunda parte llegaron los goles y la emoción desenfrenada. Joe Ledley, con un gran tiro ajustado desde la frontal del área 'red', puso el momentaneo 1-0 en el 49' para su equipo, que se hizo también con el dominio del balón.
En el minuto 60 pareció llegar la autosentencia del Liverpool, pues Milner se marchó expulsado por doble amarilla. Pero lejos de venirse abajo, la escuadra de Merseyside tiró de orgullo y coraje y logró empatar gracias a un mano a mano definido a la perfección de Roberto Firmino.
A partir del gol del brasileño el equipo de Klopp se hizo dueño y señor del partido. Los últimos compases fueron de locos pues ambos equipos buscaban el tanto de la victoria pero fue justo 20 segundos antes de que el árbitro pitara el final del partido cuando Benteke provocó un penalti.
El ariete belga anotó el penalti con toda la tranquilidad del mundo, golpeando el balón muy despacio y engañando al portero. Gracias al triunfo, el Liverpool se sitúa en séptima posición con 44 puntos. Por su parte, el Crystal Palace continúa en la plaza número 15 a nueve puntos de la zona de descenso.