El Venezia está de enhorabuena y no es para menos, ya que, cuando todo apuntaba a la prórroga, el cuadro dirigido por Paolo Zanetti alcanzó el éxtasis con el tanto del ascenso en el minuto 93 de partido por mediación de Bocalon.
Arrancaron los 90 minutos cruciales para decidir qué equipo subía a la Serie A y pronto se evidenció que iba a ser un choque de alta tensión. El conjunto local tenía una ligera ventaja tras ganar a domicilio al Cittadella por 0-1, aunque el resultado no era para confiarse mucho.
Los visitantes llegaron al estadio con la intención de pelear hasta el último segundo y en el minuto 26 dieron constancia de ello. Proia puso patas arriba la eliminatoria con el 0-1 e igualó la serie con mucho partido por delante.
Pero las malas noticias para el Venezia no se quedaron solo ahí: Mazzochi fue expulsado en solo un minuto tras dos entradas duras consecutivas. El colegiado sancionó ambas con tarjeta amarilla y el futbolista tuvo que encarrilar los vestuarios antes de tiempo. Una expulsión infantil que dejó en inferioridad numérica a su equipo, que iba por debajo en el marcador.
La segunda mitad comenzó como la primera, poco dominio por parte de ambos conjuntos y mucho respeto sobre el césped. Lo que sí fue subiendo de nivel fue el juego brusco y duro, lo que dio mucho trabajo al colegiado.
En el minuto 70, Aramu, que entró en la primera mitad, fue expulsado con roja directa y puso prácticamente imposible la tarea para su equipo. El Venezia afrontaba 20 minutos con nueve jugadores y un Cittadella totalmente volcado sobre la portería de Maenpaa.
Sin embargo, el destino tuvo guardado hasta el final la más bonita de las victorias para los locales. Bocalon, tras un contragolpe de libro, desató la locura sobre el césped del Pierluigi Penzo con un tanto valiosísimo en el minuto 93 de partido.
No hubo tiempo para mucho más y con este tanto y el resultado de la ida, el Venezia ascendió a la Serie A tras 19 largos años de espera. Sin duda, un premio que tardarán mucho tiempo en digerir en la pequeña ciudad italiana.