"No sé si es favorable o no, pero hay que manejarlo dentro de la cancha, teniendo la pelota, jugando con la desesperación de ellos", señaló Lampe a 'EFE' en referencia al peso que puede representar para los dueños de casa su condición de local y las exigencias que tendrán por parte de los hinchas y de la prensa.
Para el guardameta de 32 años, frente a esas exigencias, los brasileños "tienen la presión por salir ganando rápidamente el partido". "Pero mientras nosotros aguantemos vamos a poder generar situaciones de gol para que ellos se sientan más nerviosos", añadió.
Bolivia fue la segunda selección en llegar a Brasil, después de la Catar y tras perder el último amistoso ante Francia (2-0) en territorio galo, y estuvo concentrada durante casi una semana en el Centro de Formación Deportiva del club Sao Paulo, en el municipio de Cotía, en la región metropolitana de la mayor ciudad brasileña.
"Con el tiempo, hay cosas para corregir y las hemos corregido. Estamos preparados para enfrentar este desafío y es un partido duro", apuntó el portero.
Lampe comentó también sobre el "recambio" de la selección boliviana propuesto por el técnico Eduardo Villegas, quien para esta edición de la Copa América presentará a varios jugadores de las nuevas generaciones.
"Ellos tienen que estar tranquilos, tienen el apoyo nuestro y cuando entren tienen que demostrar lo que saben en la cancha. Los más experimentados los vamos a apoyar, porque todos vamos para adelante, para el frente", subrayó.
En el primer semestre de este año, Lampe jugó en calidad de préstamo con San José de Oruro, en su país, y después de la Copa América deberá retornar a las filas del chileno Huachipato, dueño de sus derechos deportivos.
No obstante, el portero confirmó que existe el interés de "un par de equipos argentinos" en hacerse a sus servicios, entre ellos Colón, de Santa Fe.
"Eso no depende de mí. Si se da (el traspaso) antes de la Copa será bienvenido y si no va a ser después, para la mejor decisión que se pueda tomar. Tengo contrato vigente en Chile y estoy tranquilo y enfocado en la Copa América. No nos podemos desviar de lo que será el partido contra Brasil", comentó.
Para Lampe, que ya llegó a tener una oferta del club brasileño Bahía de Salvador, militar en ligas como las de Brasil o Argentina, donde estuvo en 2018 con Boca Juniors y a la que podría retornar, representa poder actuar en países con "un lindo mercado, competitivo, pasional y con esa presión como nos gusta".
A pesar de no haber conseguido disputar un solo partido con Boca Juniors, al que llegó en el último trimestre de 2018 para sustituir al lesionado Esteban Andrada, Lampe destacó su paso por el popular equipo de la capital argentina.
"Fue cumplir un sueño, llegar a un club tan grande a nivel mundial es muy lindo para uno. Por ahí no se me dio la oportunidad de poder jugar, pero fue un paso con mucha enseñanza para seguir madurando en este puesto de portero. Me sirvió para afrontar como lección de vida", concluyó el guardameta.
Bolivia dejó la concentración en Cotía y desde el martes está en Sao Paulo para preparar el partido ante Brasil del próximo viernes.
La 'Verde' realizó este miércoles una práctica matinal al puertas cerradas y anunció a Ramiro Vaca como sustituto de Rodrigo Ramallo, quien no consiguió recuperarse y quedó por fuera del torneo.