Bonito encuentro entre el jugador y el entrenador rival que le salvó vida

Ambos mostraron la cara más humana del fútbol al fundirse en un abrazo en este reencuentro con motivo del partido de Regional que midió a sus equipos, justo una semana después de que Sergio, de 20 años, se golpeara la cabeza con una valla en el Monachil-La Cañada Atlético y de que el entrenador rival le socorriera practicándole los primeros auxilios.

Los hechos ocurrieron en la pasada jornada de liga del Grupo II de la División de Honor Andaluza sénior, cuando en el minuto 83 de ese encuentro, jugado en el Manuel Robles de Monachil (Granada), el futbolista de La Cañada sufriera un fuerte golpe en la cabeza, tras una carga de un jugador local, y se quedara inconsciente.

El almeriense recibió la ayuda inmediata de sus compañeros y adversarios, pero en la grada estaba Valenciano, el entrenador del equipo jiennense del Villacarrillo -rival de ambos contendientes-, quien no dudó en saltar al campo para practicarle los primeros auxilios antes de que fuera trasladado al hospital de La Salud en Granada.

"Cada dos semanas voy a Monachil porque nosotros cogemos al rival que van soltando ellos", ha explicado a Efe el técnico del Villacarrillo, que esa mañana había vuelto a recorrer los casi doscientos kilómetros que separan ambos municipios para estudiar a La Cañada, su rival de hoy.

"No recuerdo nada de aquella jugada", ha relatado a Efe Sergio López, tan "solo detalles de antes", mientras que del golpe que puso en peligro su vida sólo recuerda lo que le han dicho sus compañeros.

El joven futbolista, que estudia un curso de grado superior de mantenimiento de instalaciones térmicas y de fluidos, ha señalado que, cuando al cabo de un tiempo se despertó, todos le "hacían preguntas y no sabía responder".

David Valenciano, su 'salvador', ha comentado que "fueron unas imágenes muy fuertes" y que al principio se quedó "sorprendido por lo que se estaba viviendo", pero que por "un impulso" saltó al terreno de juego porque "había una persona que necesitaba ayuda".

"Más allá de lo que pudimos aplicar, creo que fue más suerte que otra cosa, porque afortunadamente se quedó en un susto y no pasó a mayores", narra el entrenador del equipo jienense, que recuerda la jugada como "un forcejeo en el que ambos futbolistas luchan por el balón, hay una carga y Sergio se desequilibra y choca contra la valla, con la mala fortuna de que se da en la cabeza".

En ese momento, ha añadido el técnico del modesto Villacarrillo, "el fútbol es lo de menos, somos personas y para todos lo que prima es la persona", con lo que entre la conmoción general supo reaccionar y aplicar las medidas necesarias de primeros auxilios.

Valenciano le sacó la lengua para que no le obstruyera la vía respiratoria y colocó al futbolista en la posición de seguridad.

"Le estoy muy agradecido tanto a él como a los compañeros que estuvieron colaborando. Voy a estarles agradecido toda la vida", ha asegurado Sergio, que, casualmente, acaba de comenzar un curso de socorrismo al que estaba inscrito para trabajar en el verano y en el que ya ha visto los primeros auxilios que le tuvieron que practicar hace una semana.

Ante el sentimiento de gratitud mostrado por el chaval, Valenciano ha dicho que "no tiene que estar agradecido, son cosas que pasan", además de que, aparte de él, "había más gente". "Me quedo con las cosas buenas que tiene el deporte, y aquí tiene un amigo para toda la vida", ha recalcado.

La resonancia que se le realizó a Sergio reveló que tiene un pequeño coágulo de sangre en la cabeza por el cual debe guardar reposo absoluto dos semanas más, motivo por el que no pudo vestirse de corto esta mañana en el partido en el que La Cañada, que ocupa puestos de descenso, sorprendió al equipo de Valenciano, líder del grupo (1-0).