Keisuke Honda solo ha disputado 63 minutos desde que llegó a Botafogo. Primero, una lesión de retuvo de debutar y luego llegó el parón por el coronavirus.
En este tiempo, que corresponde a un solo partido ante Bangu en el Carioca, consiguió marcar un gol de penalti, pero no pudo liderar a su equipo a la victoria.
La llegada del nipón al conjunto brasileño desató la locura entre sus seguidores, que podrían disfrutar de él más tiempo del que en un primer momento habían pensado.
Aunque su primer contrato duraba hasta finales de 2020, 'Globoesporte' asegura que Botafogo ya quiere ofrecerle una renovación hasta finales de 2021.