El Bayern de Múnich no está para concesiones. El último tropiezo obliga a los de Thomas Tuchel a imponerse en el partido aplazado en su día en la Bundesliga al Union Berlin para no perder comba con un Bayer Leverkusen que se escapa en la tabla. Bouna Sarr, en el dique seco por una inoportuna rotura de ligamento cruzado, volverá a seguir las evoluciones de sus compañeros desde la grada, algo a lo que se había acostumbrado incluso cuando estaba en plena forma.
El fichaje del senegalés es uno de los más extraños que ha realizado el conjunto bávaro a lo largo de su historia. En 2020, desembolsó 8 millones de euros para hacerse con el lateral del Olympique de Marsella, que desde entonces no ha disputado nada más que 33 citas con el equipo de Múnich. Con un promedio de 39.12 minutos por cada uno de los encuentros en que se ha vestido de corto en el club alemán, hay muchos aficionados que ni tan siquiera le ubican en el Allianz Arena.
Para empezar, Sarr nunca ha contado con la confianza de los técnicos que ha tenido el Bayern de Múnich en este tiempo, pero es que el defensa también ha padecido recurrentes problemas físicos que, sin ir más lejos, ya le costaron la participación en el Mundial de Catar con la Selección Senegalesa. Después de disputar 181 partidos en 5 años en su anterior equipo, nada hacía presagiar que el senegalés iba a contar con tan poca continuidad en el conjunto bávaro. 15 fueron las citas totalizadas en una 2020-21 en la que sí tuvo algo más de presencia con Flick (9 titularidades y 810 minutos). En la 2021-22, ya con Nagelsmann, bajó hasta los 12 choques y únicamente 275 minutos. Por último, durante la 2022-23 solo pudo disputar 1 partido y en la presente campaña llevaba 5 encuentros y 204 minutos hasta su grave lesión.
De nuevo, el defensa tuvo que despedirse de una gran cita con Senegal como la Copa África en este año 2024, al tiempo que sus días en el Bayern, con el que acaba contrato en unos meses, podrían estar llegando a su final. No tanto ahora por los problemas físicos por los que ha atravesado en los últimos 2 cursos, pero sí que sorprende que Sarr no se decidiera a buscar otro club en vista de que la poca continuidad de que dispuso en el equipo del Allianz Arena nada más llegar.
Curiosamente, el zaguero tiene un registro muy positivo dentro de lo instrascendente que está siendo su paso por el Bayern de Múnich. Y es que enlazó sus primeros 31 partidos con la camiseta bávara sin derrotas, una racha que se cortó contra el Saarbrücken en la DFB-Pokal el pasado 1 de noviembre de 2023, en su penúltimo partido luciendo los colores del conjunto germano. En la Bundesliga, donde aún no ha perdido, enlaza 16 choques consecutivos sin derrotas, un registro que, dado el buen momento del Bayer Leverkusen, solo le sirve para ocupar el 9º lugar.
Más allá de su poca participación, el zaguero sí que ha sentido como propios triunfos de prestigio como el 4-0 al Atlético de Madrid en la Champions League de la 2020-21, el 2-3 al Borussia Dortmund en la Bundesliga de la misma temporada, el título de la Supercopa de 2021 conquistado también frente al equipo aurinegro o el 3-0 al Barcelona de Xavi en diciembre de 2021.