Después de una primera parte de la temporada en la que Brandon no estaba gozando de protagonismo con Osasuna, se unió a las filas del Girona para solventar la carencia de goles de la escuadra. Por ahora, solo lleva uno, pero su rendimiento está siendo satisfactorio.
Lleva ya ocho encuentros de los que ha sido titular en cinco y, a pesar de su solitaria diana, está dando buenas sensaciones sobre el terreno de juego. Incisivo, siempre encara al rival y tiene algo más que dar a los suyos en cada jugada ofensiva.
En la última jornada, afrontó la misión más complicada hasta ahora como jugador albirrojo: sustituir a Stuani. El 'Pichichi' de Segunda era baja por acumulación de tarjetas y él tuvo que salir en punta para que no se le echara de menos: lo logró del todo.
Marcó el primer tanto del partido gracias a un error fatídico de la defensa de la Ponferradina y continuó llevando peligro a los dominios de René en el resto del duelo. Una prueba final de que es el hombre que buscaban los catalanes para su misión de ascender.