Éder Militao comienza a acercarse al jugador en el que el Real Madrid había depositado grandes esperanzas para que liderara su defensa en el futuro. Tras un primer curso muy decepcionante, que cerró con apenas 20 partidos y ni 1.500 minutos de juego, el segundo parecía seguir el mismo camino.
Sin embargo, la avalancha de lesiones le tenía reservada al central de Sertaozinho una nueva oportunidad como 'merengue'. Con problemas físicos Ramos y descartado por COVID-19 Varane, a Zidane no le quedó más remedio que recurrir a él, quien había quedado marcadamente señalado con su expulsión ante el Levante en la última derrota en Valdebebas de los blancos (1-2).
Desde el 2-0 ante el Eibar, el central ha jugado cinco partidos seguidos, entre ellos una eliminatoria de Champions ante el Liverpool y el 'Clásico' contra el eterno rival. El balance, más allá del tropiezo en Getafe, es muy positivo, con tres triunfos, dos igualadas y, sobre todo, solo dos goles encajados en contra.
Aún está lejos de sus estadísticas en el Oporto, aunque hay que tener en cuenta que ahora se enfrenta a rivales mucho más duros de los que tenía que vigilar en el equipo luso. Pero hay motivos para la esperanza, pues un repaso a sus estadísticas en BeSoccer Pro confirma que se acerca poco a poco al futbolista fiable que fue en Portugal.
Aunque sus números, con apenas 12 partidos jugados y casi todos concentrados en este 2021, son meramente orientativos, esta temporada es la que más balones recupera por cada falta que comete y la que más duelos defensivos gana. Además, se ha mostrado mucho más fiable en los balones aéreos.
Con solo 23 años, el Real Madrid ha redescubierto a un jugador que daba por perdido y que, ante la salida de Sergio Ramos y las dudas en el futuro de Raphaël Varane, podría ser muy útil en el futuro cercano. Su próxima reválida, ante un Cádiz que ya fue su verdugo en el partido de la primera vuelta, ese en el que Zidane apostó por las rotaciones y en el que Militao no duró más de media parte.