El final del calvario está cerca. Bruno Soriano ve la luz al final del túnel después de estar apartado de los terrenos de juego casi un año. El capitán tiene mejores sensaciones y vuelve a ser optimista.
Su situación ha sido muy difícil esta temporada. No ha jugado ni un sólo minuto y su reaparición parecía estar cada vez más lejos. Una lesión en la tibia, de la que se operó en el mes de julio del año pasado, es la culpable.
Según recoge el diario 'AS', el futbolista no encontraba solución a sus dolores a pesar de haber cambiado de tratamientos, especialistas, estrategia y médicos. Pero a día de hoy, el medio en cuestión afirma que el futbolista tiene buenas sensaciones.
La idea del club y de Bruno es que trabaje su dolencia estos dos próximos meses, para así poder reaparecer junto al resto de sus compañeros al principio de la temporada 2018-19. Bruno ya enfila la recta final.