El guardameta italiano de la Juventus salió con muchísimo ímpetu a comerse al árbitro después de que señalara un penalti que acabó costándole la eliminatoria al equipo turinés, que ganaba por 0-3, un resultado que habría forzado la prórroga.
Buffon, en el que podría haber sido su último partido de Champions, consideró que la pena máxima no debió de haberse pitado y, como capitán del equipo italiano, fue el primero en echarse encima del colegiado, llegando incluso a contactar cuerpo a cuerpo con él.
Las protestas de Buffon, en las que podría haber algún insulto implícito que haya determinado la decisión drástica de mostrar una cartulina roja directa, le costaron tener que abandonar el terreno de juego, siendo sustituido por Szczesny, que salió en lugar de Higuaín.
Pese a todo, el público del Santiago Bernabéu rindió pleitesía al considerado como uno de los mejores guardametas de la historia, despidiéndole del campo con una sonora ovación.
11 de abril de 2018