La visita del Cádiz al Atlético de Madrid acogió uno de los momentos más llamativos del fin de semana en la Liga Española. Fali, defensa del conjunto andaluz, tuvo que ser sustituido en la primera mitad por unas molestias en su cuádriceps. Hasta ahí, todo es normal. Lo curioso es que, al levantarse un poco el pantalón como suelen hacer los jugadores cuando sufren de este tipo de dolencias, se le pudieron notar tres bultos en la pierna.
Las cámaras le enfocaron durante algunos segundos mientras se retiraba cojeando hacia la banda, donde los servicios médicos de su club le esperaban. Hay que esperar a los próximos días para conocer su diagnóstico y si tan solo se trató de un pinchazo, pero, de momento, la causa que confirmó el propio jugador a Pablo Pinto, de 'DAZN', a pie de campo es una serie de lipomas de grasa fruto de roturas musculares previas.
Los lipomas son bultos de grasa bastante comunes hasta el punto de que muchos de ellos nunca terminan de detectarse porque, sencillamente, quien los porta no se da cuenta. De hecho, suelen ser fáciles de mover presionándolos con los dedos y no suponen ningún riesgo para la salud. La otra opción sobre su cuadro clínico, una afectación en el sartorio, con la que se conjeturaba sí que hubiera conllevado un problema para los planes de Sergio González.
El músculo sartorio es de tejido esquelético, estriado y se ubica en el interior de la pelvis. Se extiende hasta la rodilla y fue de las razones iniciales por las que se pensó que Fali pidió el cambio, aunque, como ya se ha explicado, él mismo lo explicó nada más salir del terreno de juego.
October 1, 2023