El fugaz paso de Malcom por el Barcelona aún es de difícil comprensión. El crack brasileño llegó tras un giro de guion tremendo, cuando tenía su fichaje por la Roma apalabrado.
Han pasado los años y, pese a que el Barça rescató casi lo mismo que invirtió tras venderlo al Zenit, ese traspaso aún sigue generando enormes dudas en el entorno del club.
André Cury, ex responsable de los ojeadores del Barcelona en Brasil, mostró su indignación por este fichaje y exigió responsabilidades en 'Què t'hi jugues' de la 'Cadena SER'.
"Yo ya había llevado dos veces al Barça a los agentes del jugador. Para ir a Burdeos, que está a 30 minutos, no hace falta un intermediario. ¿Cómo vas a pagar a un intermediario diez millones de euros? ¿Por qué le dieron seis o siete millones de euros a una empresa de Brasil que tenía como beneficiario final al agente del jugador?", se preguntó en el mismo programa en el que habló del supuesto barcelonismo de Vinicius.
"Las comisiones a Junior Minguella por el fichaje de Malcom me parecen un escándalo. Una de las mayores vergüenzas de la historia del club. Es un delito fiscal, cambiaron los contratos del jugador. Es algo que tendrán que explicar él y el jefe del departamento legal del club Román Gómez Ponti", concluyó Cury.
Además, el antiguo colaborador del Barça reconoció que dio el visto bueno al fichaje de un Matheus Fernandes que salió tras rescindir su contrato después de no tener oportunidades: "Di el visto bueno porque me parecía un buen jugador. Tiene condiciones para ser el 'nuevo Busquets'. No entiendo a Koeman (por no ponerlo)".