El 'Verdolaga' ya sueña con su título liguero número 17 y parece que ya ha empezado a poner su nombre en el Torneo Apertura. El conjunto que dirige Hernán Herrera ha dado un zarpazo casi mortal después de superar en el Atanasio Girardot a Deportes Tolima en la ida de la final con un contundente 3-1.
Un partido que bien pudo haber tenido un resultado mejor para un Atlético Nacional que dominó de cabo a rabo. Los locales salieron decididos y pronto se hicieron con el control. Por su parte, los 'Pijaos' se replegaron y se metieron en su propia área en busca de oportunidades a la contra o a balón parado.
Y así llegó el primero, desde un córner. Pero antes, los de casa firmaron una gran ocasión en las botas de Guzmán, quien se topó con Domínguez en el palo corto tras un disparo fuerte y tenso. Minutos después, Plata no desaprovechó la indecisión defensiva para colarse en el segundo palo y rematar a placer.
Cataño puso un centro desde el córner al primer palo y ni Mier ni la defensa despejaron. Ahí apareció el '11' para rematar casi con el estómago para encarrilar la final. Fue ahí cuando el conjunto local mejor se posicionó sobre el campo y más efectivos empezó a acumular en el área contraria.
Tanto fue el cántaro a la fuente que se rompió y Banguero puso la igualada a las puertas del descanso. Un desatado Candelo por banda derecha soltó un misil desde 35 metros que fue repelido al centro por el portero de Tolima. Banguero se adelantó a los zagueros y empujó el cuero para establecer la igualada en el marcador.
Un golpe psicológico que ayudó a Atlético Nacional en la reanudación. Sin embargo, el paso de los minutos y los cambios provocaron una bajada de nivel considerable. Fue ahí el momento en el que Candelo se puso la capa, desenvainó la varita e hizo un truco de magia al alcance de muy pocos.
Pasado el minuto 70, el '19' robó una balón en el centro del campo tras una faltan de Deportes Tolima. Tras eso, miró adelante, vio la posición adelantada de Domínguez y chutó hacia portería con un sutil, pero eficaz disparo. El esférico cogió una parábola perfecta y acabó dentro de las mallas, por encima del meta.
Sus compañeros y todos los hinchas explotaron de alegría con el que fue el tanto de la remontada. Una diana que dejó helados a los 'Pijaos' y que hundió sus esperanzas. Los minutos finales fueron de asedio por parte de los visitantes, que se volcaron, pero olvidaron defender y se pegaron un tiro en el pie.
Mier lanzó la contra y Gómez encaró a su par mientras que un recién entrado Andrade le dobló por su izquierda. El '10' recibió y con todo el tiempo del mundo se la acomodó a su diestra y tiró con clase al palo largo para hacer el 3-1 y dejar el título casi sentenciado para su equipo.
Aunque el resultado de dos goles de diferencia es elevado para una final, Atlético Nacional tiene todavía que visitar el feudo de Deportes Tolima en cuatro día para poner el broche de oro a un gran Apertura por parte del combinado 'verdolaga'.