Carvajal se lesionó en el partido de Champions ante el CSKA el pasado día 2 de octubre y al Real Madrid se le avecinó un problema serio, ya que el defensa estaría de baja hasta un mes y medio.
Los blancos contaban con el recambio de Odriozola, que respondió cuando se le dio la oportunidad, especialmente con Solari en el banquillo.
Cuando el vasco se lesionó en Eibar, Carvajal adelantó su vuelta y se enfrentó a un excelso Cucurella que bailó al Real Madrid en Ipurua. No destacó, como tampoco lo hizo ningún jugador del Real Madrid.
En Roma las cosas fueron distintas y jugó el primer partido completo desde que se lesionó, sin acusar problemas físicos.
Y en la victoria ante el Valencia confirmó que está recuperando su mejor nivel a un ritmo trepidante. Se mostró inconmensurable y de sus botas nacieron los dos goles de los 'merengues'. Fue pleno y decisivo.