A él mismo le pasó algo parecido y tuvo que regresar desde su domicilio al estadio para someterse a pruebas. De ahí que, en el programa 'Tiki Taka', interpelara al portugués para dejar claro que no puede volver a hacer lo de irse antes de tiempo del enfrentamiento.
"Eso no lo puedes hacer porque luego hay control antidopaje. Yo tuve que volver rápido al estadio para evitar una descalificación de dos años", aseguró, dejando claro que el castigo al 'crack' podría ser bastante duro en caso de volver a repetir la acción.
Y es que a Cassano también le pasó: "Fue hace 12 años. Capello me cambió, me enfadé y me fui a casa. Tuve que volver". Cristiano tampoco se tomó bien tener que salir del terreno de juego, pero Sarri, su entrenador, le quitó importancia.
"No hay ningún problema con él. Es normal que un jugador se enfade cuando es sustituido. Hay que permitir que tenga sus cinco minutos de 'mosqueo'. Estaría más preocupado si no se enfadase", afirmó el técnico. No hay tensión entre él y su pupilo.