Arrancó el último partido de la jornada 1 en el Grupo B. Bélgica y Rusia se enfrentaron en San Petersburgo, en un choque marcado por el tremendo susto de Eriksen en el otro partido del grupo.
Dicho encuentro volvió a poner el corazón en el puño a los aficionados tras el choque fortuito de Castagne y Kuzyaev. El futbolista belga tuvo que ser sustituido en el minuto 27 y se pudo ver con la parte derecha del rostro totalmente hundido, en lo que aparentemente será una fractura en el pómulo como mínimo.
El jugador ruso también tuvo que abandonar el terreno de juego, aunque este quedó menos afectado para fortuna de su entrenador Cherchesov.
Bélgica salió en modo arrollador y se puso muy pronto por delante con el gol de Lukaku en el minuto diez. El recién entrado Meunier fue el encargado de hacer el segundo tras un error de Shunin y dejó clara la superioridad de los de Roberto Martínez.